1. Sofrito de base

En una cazuela, añade un chorrito de aceite de oliva y sofríe la cebolla, el pimiento y los ajos picados durante unos minutos, hasta que queden dorados y fragantes.

2. Añade el chorizo y el pimentón

Incorpora el chorizo cortado en rodajas y sofríe brevemente. Cuando empiece a soltar su grasa, añade el pimentón y el tomate frito. Remueve para integrar todos los sabores.

3. Incorpora las alubias Osés

Abre el bote de alubias negras Osés, escúrrelas ligeramente (puedes conservar un poco del líquido) y añádelas al sofrito. Agrega la hoja de laurel, una pizca de sal y un chorrito de agua o caldo para ajustar la textura.

4. Cocina a fuego suave

Deja cocer durante 10-12 minutos a fuego medio-bajo, removiendo de vez en cuando. El objetivo es que los sabores se mezclen sin que las alubias se rompan. Si lo deseas, puedes aplastar algunas con la cuchara para espesar el caldo.

5. Ajusta y decora para Halloween

Rectifica de sal y retira la hoja de laurel. Sirve las alubias en cuencos oscuros o negros para potenciar la presentación.
Decora con “ojos” comestibles hechos con rodajas de queso y aceitunas negras en el centro.
El contraste visual con el fondo oscuro del guiso es perfecto para la noche de Halloween.